Nos despedimos de la temporada 2021 muy agradecidos por la confianza que nuestros clientes han depositado en nosotros una vez más.
Y cerramos las puertas para centrarnos en la expansión de la experiencia Can Faustino.
La experiencia, dicen, es un grado. Y todas las temporadas que ya llevamos a nuestras espaldas nos reafirman en que el proyecto que hemos creado va acorde con los valores que nuestros clientes buscan en Menorca. Calidad, cercanía, autenticidad, personalidad y esencia isleña se mezclan en un cóctel de lugares, momentos y actividades mágicos. Desde las íntimas cenas en el patio de Can Faustino, a los baños en la piscina de Can Llorenç y Cal Bisbe a los pies de la Catedral. O la oportunidad de descubrir la costa desde el mar, a bordo de uno de nuestros barcos clásicos. También las tardes bajo la sombra de los pinos mediterráneos en el Country Club, tras saborear un plato elaborado con mimo y cuidado con el mejor producto de nuestra huerta. Todos estos momentos forman lo que, para nosotros, es el mayor tesoro que uno se puede llevar de Menorca: los recuerdos que le acompañarán de por vida.
Con Faustino Gran queremos seguir contribuyendo a crear recuerdos únicos en las mentes y corazones de quien nos visita. Y que vivan en propia carne la esencia del puro Mediterráneo.
Cambiamos para mejorar
Todos los pasos que estamos dando para ampliar su álbum de recuerdos va en una misma dirección: crear experiencias únicas, inmersivas y auténticas. Por eso, el nombre no será el único cambio que cocinemos durante estos meses. Queremos ser artífices de vivencias que quedarán grabadas a fuego en la piel, y que quedarán asociadas para siempre a los nombres de Ciutadella y Menorca.
Si el año pasado pudimos dar un paso más en la ampliación de la experiencia Can Faustino con la apertura de los palacios Cal Bisbe y Can Llorenç, para la temporada 2022 queremos que el cambio sea aún mayor. Por ahora solo podemos avanzar el nombre de esta nueva aventura, Faustino Gran, y la imagen que lo acompaña. Una palmera, evocando la exubernacia que caracteriza a los patios de nuestros palacios en pleno centro histórico; un ancla, que dirige de forma sutil hacia esos azules y turquesas que bañan las costas de Menorca; y, en el centro y corazón de nuestra imagen, la cruz de San Juan, como símbolo que une mar y tierra en la personalidad única de Ciutadella. Todo esto y más es Faustino Gran.
Estén atentos a sus correos, a nuestras redes sociales y página web, donde les informaremos de todas las novedades para la próxima temporada, durante la que esperamos verle de nuevo. Porque 2022 promete ser un año muy especial.